¿De qué se trata?
Debido al estereotipo de belleza que se ha impuesto desde hace años, las mujeres desean reducir el contorno de su cuerpo para acercarse más a ese ideal (muchas veces realista, y otras realmente utópico).
Está en nuestras manos ayudarlas a conseguir las medidas saludables para su cuerpo. Con esto quiero decir que es importante hacerles entender que cada ser humano tiene su singularidad y no todas pueden lucir una cintura de 60 cm.
Las famosas medidas “ideales” (o irreales dependiendo de la sociedad en la que uno viva) 90-60-90 son idóneas para una mujer de contextura media a pequeña, nunca una fémina de gran porte puede llegar a esa talla manteniéndose saludable ni en el peso adecuado para su cuerpo.
También hay que tener en cuenta la edad de la persona; no es lo mismo el cuerpo de una jovencita de 20 años al de una mujer que ha pasado los 40 y ha tenido hijos.


Una vez que la paciente entendió esto, podemos comenzar a trabajar en ella para que consiga verse bien y se sienta de igual modo consigo misma, pero de una manera real y sana para su mente y organismo.
Las esteticistas contamos con variedad de herramientas que nos facilitan el trabajo de reducir medidas corporales, y los resultados reales los obtenemos con el trabajo en sinergia de estas técnicas, más el aporte de la paciente con la alimentación, hidratación y actividad física.
Si bien no es posible dar un esquema de tratamiento definitivo, porque la elección de las técnicas depende de la paciente en particular, es importante destacar que para la reducción de medidas se requiere ir modificando el trabajo conforme pasa el tiempo, con el fin de obtener los mejores y más rápidos resultados.
Por otra parte, todo proceso de reducción de medidas requiere de drenaje linfático, ya sea manual o con presoterapia, para ayudar a la paciente a eliminar los ácidos grasos liberados al torrente sanguíneo.
Paralelamente, en los casos en los que la adiposidad es muy importante y/o hay laxitud de tejido, se recomienda incluir un tratamiento contra flacidez a medida que va reduciéndose el contorno con el fin de evitar la flojera del tejido.
